En lo más profundo de un bosque olvidado por el tiempo, una antigua mansión en ruinas se erige como un vestigio de un pasado envuelto en sombras. Durante generaciones, los habitantes del pueblo cercano han susurrado historias sobre la casa y las extrañas desapariciones vinculadas a ella, pero pocos se atreven a acercarse. Sin embargo, cuando Clara, una intrépida periodista de sucesos paranormales, recibe un aviso anónimo sobre nuevos casos sin resolver en la zona, decide investigar, sin imaginar que lo que encontrará pondrá a prueba su cordura y su propia vida.

Desde el momento en que pone un pie en la propiedad, Clara siente que algo la observa. La atmósfera es pesada, cargada de un silencio que parece contener secretos antiguos. A medida que explora la mansión y entrevista a los pocos testigos dispuestos a hablar, descubre que la casa no está simplemente abandonada: una presencia oscura habita en sus muros, una entidad que ha acechado a la familia que la construyó durante siglos y que ahora parece haber despertado con más fuerza que nunca.

Los gritos que los aldeanos aseguran haber escuchado en las noches no son simples ecos del pasado, sino advertencias de un horror indescriptible. Cada pista que Clara descubre la acerca más a la verdad, pero también la sumerge en un peligro creciente. Pesadillas perturbadoras, sombras que se deslizan entre las paredes y puertas que se abren solas la llevan a cuestionar su propia percepción de la realidad.

Pronto, Clara se da cuenta de que ya no es solo una espectadora: la mansión la ha elegido como su próxima víctima. En una carrera desesperada contra el tiempo, deberá enfrentarse no solo a los horrores ocultos en la casa, sino también a sus propios miedos más profundos. Pero hay algo que no ha considerado… tal vez el mal que acecha en la oscuridad no quiera simplemente asustarla, sino algo mucho peor: convertirla en parte de su historia maldita.